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La verdadera razón por la cual no se permiten fotografías en la Capilla Sixtina

Tiempo de lectura: 2 minutos

Una de las mejores obras de arte de la historia, la Capilla Sixtina en el Vaticano es un popular destino turístico. Si has sido uno de los cuatro millones de afortunados que visitan el famoso lugar cada año, seguro que sabes que ¡No se permiten fotografías ni vídeos en la Capilla Sixtina! Pero, ¿conoces el verdadero motivo?

Sí, a pesar de las reglas establecidas para la silenciosa contemplación del fantástico y alucinante arte que adorna cada centímetro de las paredes y el techo de la Capilla Sixtina, los visitantes de la capilla encontrarán su experiencia salpicada de gritos de «¡No foto! ¡No vídeo!» de los guardias de seguridad. Esta prohibición ha estado vigente durante varias décadas, y aunque muchos asumen que es para evitar que los flashes de las cámaras afecten al arte, la verdadera razón se remonta a la restauración de la capilla que comenzó en 1980 y tardó casi 20 años en completarse.

restauracion capilla sixtinaCuando los funcionarios del Vaticano decidieron emprender una restauración integral del arte de Miguel Ángel en la capilla, el alto coste que suponía les llevó a buscar ayuda externa para financiar el proyecto. Al final, el mejor postor fue Nippon Television Network Corporation of Japan, cuya oferta de 3 millones de dólares (que se dispararon a 4,2 millones) no fue igualada por ninguna entidad en Italia o el resto del mundo.

A cambio de financiar la renovación, Nippon TV recibió los derechos exclusivos de fotografía y vídeo del complejo, así como fotos y grabaciones del proceso de restauración por el fotógrafo Takashi Okamura, quien representaba a Nippon TV. Si bien muchos se burlaron inicialmente del acuerdo, las fotos de alta resolución proporcionadas por Nippon ofrecieron unas imágenes de gran detalle pese a todos los andamios que ocultaban cada etapa de la restauración, y finalmente recibieron críticas positivas.

Como resultado del acuerdo, Nippon produjo múltiples documentales, libros de arte y otros proyectos con sus fotos y filmaciones exclusivas de la restauración de la Capilla Sixtina

La prohibición de hacer fotografías dentro de la capilla sigue vigente a pesar de la expiración de los términos del acuerdo con Nippon. En 1990, The New York Times informó que la exclusividad comercial de Nippon expiraba tres años después de que se completara cada etapa de la restauración. Por ejemplo, las fotos de la representación épica de El juicio final de Miguel Ángel ya no estaban sujetas a los derechos de autor a partir de 1997, porque esa etapa de la restauración se completó en 1994.

Para la firma del contrato, Nippon exigió que la prohibición de tomar fotografías se aplicara también a los «turistas comunes», no fuese que algún fotógrafo profesional se disfrazara con pantalones cortos, calcetines y sandalias de las Bermudas, así que las autoridades vaticanas lo convirtieron en una política general.

miguel angel capilla sixtinaLa restricción sigue vigente en la Capilla Sixtina (aunque, como pueden confirmar algunos visitantes recientes, su aplicación no es exactamente estricta). Dado el daño que pueden causar los miles de flashes de las cámaras que se disparan en la capilla cada día, no sorprende que los funcionarios del Vaticano decidieran no poner fin a la prohibición cuando expiró el contrato de Nippon.

Después de todo, la capilla alberga algunas de las mejores obras de arte del mundo, y una tienda de regalos repleta de fotos de recuerdos, por supuesto.

(*) Referencias: Rick Marshall, Mental Floss Imágenes: WikimediaCommons//Dominio Público

2 COMENTARIOS

  1. Muy típico de «La Santa Madre Iglesia» El negocio es el negocio, no vaya a ser que no vendamos postales por culpa de los turistas y perdamos dinero. Todo a mayor gloria de Dios, por supuesto…

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