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Massada, antes morir que rendirse

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Historia del sitio de Massada

Un lugar clave para el espíritu del pueblo judío, Massada. Esa meseta descarnada que se ha convertido en un signo de identidad para Israel, fue el último reducto de la resistencia durante la conquista romana. Un lugar desnudo en la orilla occidental del Mar Muerto, un peñote estéril como todo lo que lo rodea, donde se escribió una de las páginas más desesperadas de la historia.

Massada y rampa de asedio
Massada y rampa de asedio

En esta meseta allá por el año 63, casi 1.000 judíos decidieron suicidarse antes que rendirse a las legiones de Roma. Al menos eso es lo que relató el historiador Flavio Josefo, ya veremos si con rigor histórico o dejándose llevar por la imaginación.

Fueron las excavaciones entre 1963 y 1965 las que arrojaron más luz sobre muchos de los enigmas históricos que Massada planteaba. En las cuevas de sus acantilados se encontraron restos de gente que las habitaron temporalmente hace ya 6.000 años. Desde entonces, Massada no ha dejado de ser visitada o ocupada, pero su verdadera historia comienza hacia el año 40 a.C.

Resto de columna labrada, Massada
Resto de columna labrada, Massada

En aquella época, el rey Herodes el Grande decidió convertirla en ciudadela fortificada y construirse en ella una residencia. Tal vez por miedo a una rebelión o quizá previendo el acoso de Marco Antonio incitado por Cleopatra o sencillamente por puro capricho. El hecho es que Herodes levantó en este insólito lugar palacios, almacenes, edificios administrativos, baños públicos…

Poco queda, pero dado el aislamiento de Massada es de imaginar el esfuerzo titánico que toda la obra supuso. Arquitectos, obreros, artesanos y decoradores traídos desde Jerusalén y Jericó para levantar paredes, labrar columnas, estucar, pintar, ensolar con bellos mosaicos… Cuando la tarea estuvo terminada llegaron sus habitantes. Centenares de personas que, además de alojamiento, debían tener garantizada su intendencia. Los almacenes hallados durante las excavaciones dieron respuesta a ello, en los que había sitio suficiente para guardar desde aceite hasta legumbres, pasando por grano, dátiles, vino y todo lo necesario para tener garantizada la supervivencia durante un largo período de aislamiento.

Pero ¿y el agua?, de nuevo las excavaciones dejaron al descubierto que el agua no parecía ser un problema por seco que sea el paraje. Aunque por norma estériles y polvorientos, aquellos desiertos reciben de cuando en cuando el regalo de la lluvia, generalmente de forma tan torrencial como breve. Cerca de la meseta hay dos valles, dos cauces habitualmente secos por los que discurre el agua en las pocas ocasiones que cae. Sólo era cuestión de retenerla para no perder una gota y luego almacenarla. Dos presas y sendos acueductos se encargaron de esta labor y el almacenamiento se solucionó excavando en la roca 12 enormes cisternas. Con paciencia se consigue todo…

Tuvieron que pasar algunos años para que la fortaleza fuese puesta a prueba. La gran rebelión judía, iniciada en el año 67 había terminado sin conseguir su objetivo: expulsar a los romanos. Aun así, grupos aislados de rebeldes continuaban hostigando a los invasores. Uno de sus grupos tenía su refugio allí, en Massada. Lo componían 960 judíos entre hombres, mujeres y niños, pertenecientes a la facción de los zelotas.

Emplazamiento de Massada
Emplazamiento de Massada

Y allí permanecieron, hasta un día de la primavera del año 73 en que todos ellos encontraron la muerte… Han pasado más de 19 siglos, pero todavía son visibles en las llanuras los restos de los campamentos romanos que asediaban la fortaleza. Debió ser tan largo e infructuoso que, colmada su paciencia, el general romano decidió asaltar la meseta y terminar de una vez…

Para ello construyó una rampa de piedras y tierra por la que hacer llegar sus máquinas de guerra hasta los muros defensivos de Massada. Una obra colosal, que aún permanece en su sitio pese a los siglos transcurridos. A medida que progresaba la rampa, las catapultas hacían llover sobre la meseta miles de proyectiles; y al fin, cubierto el último tramo de la rampa, los pesados arietes pudieron abrir brecha en el muro defensivo…

Y enardecidos y deseosos de una lucha cuerpo a cuerpo que terminara con tantos años de campaña, los legionarios romanos entraron en Massada. Pero nadie salió a su encuentro… ni una flecha, ni un grito, ni una espada en alto les aguardaban… sólo el silencio.

Aquellos 960 habían elegido la muerte antes que rendirse. Si hacemos caso a Flavio Josefo -que no era un modelo en cuanto a rigor histórico se refiere-, el nombre de los diez zelotas encargados de matar al resto fue echado a suertes. Tras cumplir cada uno con su tarea otro sorteo decidió cual de los diez mataría a los nueve restantes, y el último se suicidaría.

Quién sabe, como los que murieron en Sodoma y Gomorra probablemente nunca serán encontrados sus restos, y tampoco importa demasiado. Esas tierras han devorado ya tantos muertos cuyas tumbas nunca serán halladas que mil más apenas cuentan. Una tierra estéril que siempre fue el epicentro de la tragedia humana…

Imágenes: zionism-israel.com, flickr.com, wikimediacommons   Fuentes: Massada, history 1973, Viaje a lo desconocido, Dr. Jimenez del Oso

11 COMENTARIOS

  1. A mitad de camino entre la realidad y la leyenda, un enclave mítico y singular. ¡Quién iba a decir a los del lugar que, muchos siglos más tarde, el territorio asediado por las tropas de los amos del mundo, hoy formaría parte del orden que parte el bacalao en el mundo!
    Un saludo.

    • Muchos pueblos y Estados están forjados a base de leyendas y no conviene tocarlas. En la película de Johh Ford «El hombre que mató a Liberty Valance» tenemos un ejemplo perfecto. La mentira en ocasiones ayuda, aunque en este caso hay mucho por resolver -quizás nunca se sepa-, la rampa y los campamentos haberlos haylos…
      Un saludo

  2. Tuve la suerte de estar y subir. Impresionante fortaleza natural, y unas vistas espectaculares al Mar Muerto. Y si que resistieron, un pueblo con una pasta diferente. Me ha encantado tu reseña. Bss

    • Estaba convencido de que habías visitado aquel enclave histórico, algo me lo decía 😉 Tuvieron a los romanos acampados en ascuas una buena temporada… Bss

  3. Hola Félix

    Este mito es como el entrenamiento mental, hoy en día, para entender el origen y la psicología de la

    agresión israelí. Por supuesto, sin poder explicar razón agresión israelí solamente con un mito pero

    durante toda su historia los judíos sufrieron mucho más que todas las naciones. Quizás por eso,

    tiene tanto las mentes más brillantes del mundo, quizás por eso, los judíos, que hoy en día

    mayoritariamente, son gente extraordinario en el sector de ciencia y tecnología y salud y agricultura.

    Y, quizás por eso »Masada nunca volverá a caer» antiguo lema de los judíos ahora es: »Si cae Israel

    caemos todos»

    P.S : Hay una pregunta en mi mente : ¿Hace miles de años cómo lograron los romanos este rampa gigantesca?

    Un Saludo 🙂

    • Cuenta la historia que Jerusalén ha sido destruida hasta en 44 ocasiones y siempre se volvió a levantar. Siempre ha sido una tierra deseada por todos. Y que decir de los judíos, tan perseguidos y denostados, a los cuales se les ha culpado de males sin culpa alguna. Buena observación, Arzú. Por cierto, la rampa se construyó como se hicieron las pirámides egipcias y tantas otras obras fastuosas: a base de tiempo, paciencia, esfuerzo y piedras… 🙂
      Un beso

      • claro, inocentes judíos, culpados de males sin culpa alguna,,, en qué universo paralelo vives tú? Los judíos han sido los causantes de los males de este mundo, la hermandad babilónica ha desatado guerras, y son los dueños de todos lo medios massivos, de la Reserva Federal y de la farmaceutica que mantiene enfermo al mundo. Estuve en Massada, un fraude a todas luces, mantenido al nivel del heroísmo, mediante mentiras, que claro, ponen de nuevo al pueblo judío, como las victimas ante el mundo . Leete los Protocolos de los Sabios de Sión, leete La gran conspiración judía y leete el Judío Errante, para que dejes de malinformar a la gente incauta , que se cree todo lo que dices.

        • @gabreiela… Culpar a los judíos de todos los males de este mundo es una osadía propia de radicalismos. Es más, argumentar esa defensa en textos como «Los protocolos de los Sabios de Sión», un fraude histórico antisemita más que demostrado (y reconocido por sus propios creadores) ya roza el esperpento.
          Postdata.- La gente «incauta» que lee este blog es demasiado inteligente para sacar sus propias conclusiones.

  4. Conocía esta historia, pero la cuentas tan bien que ha sido un placer volver a oír de ella, pese a lo terrible de lo ocurrido allí. La imagen aérea es espectacular, es un paraje tan árido que parece un paisaje lunar. Me alegro mucho de haber descubierto este blog. Tienes un nuevo seguidor 🙂

    • Manuel, salvo algunas zonas fértiles desperdigadas por aquí y por allá de aquellos territorios, nunca fue el enclave más paradisíaco para vivir. No obstante, durante milenios ha sido objeto de deseo por todos. Quizás por estar a medio camino entre Oriente y Occidente, quizás por ser la tierra elegida… Gracias y un saludo 😉

  5. Al igual que toda la zona de «PERSIA» o el estrecho de Dardanelos, o el canal de SUEZ o Gibraltar, el área de palestina desde varios siglos ha sido codiciada ya que es el paso obligado de oriente a occidente y de africa hacia europa. No por nada los grandes imperios siempre han ocupado esa franja. Egipcios, Hititas, Sumerios, Persas, Griegos, Romanos, Francos, Otomanos, Ingleses, Franceses. Siempre será así, antes era la ruta de la seda y las especias hoy del petroleo.

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